Bally es una marca de lujo suiza fundada en 1851, anclada en una herencia excepcional de fabricación de calzado. En la actualidad, la marca ofrece diseños únicos en accesorios, prêt-à-porter y gafas, impulsados por una fuerte estética deportiva retro.
La sede central de Bally se encuentra en Caslano (Suiza), con oficinas principales en Milán (Italia) e instalaciones de producción en Caslano para el calzado, Florencia para los accesorios y Ancona (Italia) para el prêt-à-porter.
En noviembre de 2017, Bally abrió las puertas de su nuevo showroom en Viale Piave, en Porta Venezia, Milán. El edificio ofrece 2.500 metros cuadrados de oficinas y sala de exposición en tres niveles, que albergan los equipos de diseño, VM, merchandising y comunicación de Bally.
El concepto surge del deseo de dar vida a la historia de Bally, preservando al mismo tiempo la historia dentro de las paredes de este monumento milanés, que en 1908 fue el teatro Kursaal antes de ser transformado en cine desde 1925 hasta su cierre en 1989.
La huella de distribución de Bally se extiende por 66 países de todo el mundo, con 310 tiendas minoristas y 500 puntos de venta multimarca, así como el comercio electrónico que da servicio a 34 países.